Cuando se habla de ingredientes efectivos en el cuidado de la piel, nombres como retinol o ácido salicílico suelen llevarse toda la atención. Pero hay un activo silencioso, poderoso y multitarea que cada vez gana más popularidad entre dermatólogos y expertos: el ácido azelaico.
Si buscas una piel más uniforme, libre de imperfecciones y con menos enrojecimiento, sigue leyendo. Este ingrediente puede convertirse en el nuevo favorito de tu rutina.
El ácido azelaico es un compuesto natural que se encuentra en granos como el trigo, la cebada y el centeno. En cosmética, se utiliza en forma sintética para garantizar pureza y estabilidad. Es un ácido dicarboxílico, y aunque su nombre suene fuerte, es sorprendentemente suave y bien tolerado.
Está aprobado por dermatólogos en concentraciones del 15% o más con receta, pero también se encuentra en productos de venta libre con concentraciones entre el 5% y 10%, ideal para uso diario.
El ácido azelaico tiene múltiples beneficios y se adapta a diferentes necesidades, lo que lo convierte en un ingrediente altamente versátil. Aquí te contamos por qué deberías darle una oportunidad:
Es ideal para tratar la hiperpigmentación postinflamatoria, como las marcas oscuras que deja el acné. Ayuda a inhibir la tirosinasa, una enzima clave en la producción de melanina.
Tiene propiedades antibacterianas que ayudan a eliminar la bacteria causante del acné (Cutibacterium acnes), y además desobstruye los poros suavemente, sin causar irritación como otros ácidos.
Uno de los pocos ingredientes recomendados para personas con rosácea, ya que reduce la inflamación y el enrojecimiento sin dañar la barrera cutánea.
Aunque no es un exfoliante químico tradicional, promueve la renovación celular de forma gradual, dejando la piel más lisa y luminosa.
A diferencia de otros ácidos más agresivos, el ácido azelaico no aumenta la fotosensibilidad, aunque el uso de protector solar sigue siendo esencial.
Es apto para todo tipo de piel, incluso las más delicadas, y puede combinarse con otros activos como niacinamida, ácido hialurónico y azufre.
En algunos casos puede haber una leve sensación de escozor o enrojecimiento las primeras semanas, pero suele ser temporal. Si la irritación persiste, reduce la frecuencia o prueba una concentración más baja.
El ácido azelaico no es el más famoso del mundo del skincare, pero es uno de los más efectivos, especialmente si buscas un tratamiento antimanchas, antiacné y antiinflamatorio en un solo producto.
Ya sea que estés luchando con brotes, enrojecimiento o marcas persistentes, este ingrediente tiene el potencial de transformar tu piel de forma progresiva, segura y suave.
¿Tu piel pide cambios? Tal vez es momento de probar el ácido azelaico y descubrir por qué tantos lo consideran el verdadero “multiusos” del cuidado facial.
